Este es un ejemplo de una actividad para hacer un mapeo de poder que puede usarse quienes lideran un equipo:
Paso 1: Escoja el blanco de su campaña. Es mejor escoger una persona en lugar de una institución, pues así es más fácil entender qué les puede influenciar de manera más específica.
Paso 2: Mapee quiénes influencian a la persona escogida como blanco de la campaña. Pídale a su equipo que ubique personas e instituciones de la comunidad en el mapa. Como verá, hay dos ejes en el mapa: uno indica qué tanta influencia tiene una persona sobre el blanco de campaña y el otro muestra si esta persona está a favor o en contra de la causa (o si es neutral).
Asegúrese de pensar de manera muy amplia acerca de quién tiene vínculos con el blanco de la campaña; piense en el ámbito laboral, político, familiar, en el vecindario. Cuando el blanco de campaña es una persona de elección popular, asegúrese de buscar a sus donantes principales así como a su electorado.
Paso 3: Pause y reflexione. Discuta con su equipo. ¿Qué observan? ¿En dónde ven oportunidades para llegarle al blanco de la campaña? Resalte con un color las personas o instituciones en el mapa con quienes ya tienen una buena relación. Con otro color resalte las personas o instituciones sobre las que consideran que pueden tener influencia.
Paso 4: Haga un plan. ¿Qué oportunidades existen para influenciar a quien han designado como blanco de campaña? Discutan de qué manera la estrategia que diseñaron puede aprovechar dichas oportunidades.
(Para consultar otra forma de pensar sobre el blanco de su campaña y sobre la influencia externa, ver: Cómo entender el poder popular: La pirámide invertida.)